PATRICIA MEDICALYSADO
LA PRIMERA EXPERIENCIA
A casi todos aquellos que nos gusta el sado, debemos remontar nuestra primera experiencia a la infancia o a la adolescencia, en algún momento, fuimos partícipes o experimentamos alguna situación que nos marcó profundamente , e hizo que nuestra sexualidad se desarrollara en esa dirección, es ahí donde hay que indagar para descubrir absolutamente todas nuestras tendencias.
La primera experiencia es en todo la más importante, puede adentrarte en aquello que experimentas por primera vez, o por el contrario traumatizarte para siempre. Mucho más en el sado, la primera experiencia es primordial, si encuentras el guía o el ama adecuada, tendrás deseos de avanzar cada vez un poco más, de conocer más sensaciones y prácticas, hasta que te quedes con la que más te guste o las que más te gusten y se adapten a ti.
La tarea fundamental del ama en la primera sesión, que el sometido recordará siempre, es la de informarlo y analizarlo, tanto en el plano físico como en el psicológico, sólo así podrá hacer una sesión a su medida.
Cuando el ama o guía, no sabe hacer todo esto y es incapaz de hacer sentir al individuo todo aquello que él necesitaba sentir, la sesión será un desastre, y las consecuencias nefastas para el sometido, que no tendrá deseos de volver a sentir nada parecido, como es lógico, lo lamentable de todo esto, es que posiblemente lo privará de futuras sensaciones, y de un mundo de fantasía maravilloso como es el sado.
En las siguientes sesiones si es que las hay, la tarea del ama es la de hacer que el individuo avance cada vez más, guiarle a nuevas experiencias, siempre dentro de sus tendencias.