top of page
PATRICIA MEDICALYSADO
EL JUEGO DE LA PROFESORA Y EL ALUMNO
Me gusta disfrazarme de profesora, para regañar y azotar a mis alumnos, ya sea por sus faltas a clase, porque no hacen los deberes, o simplemente porque me viene en gana.
Suelo ponerlos boca abajo, encima de mis rodillas y azotar sus nalgas, mientras aprieto sus genitales con mis rodillas.
En otras ocasiones los obligo a bajarse sólo los pantalones, o levantarse la falda, y con el instrumental adecuado, les aplico el castigo.
Les riño frecuentemente, sólo así les recuerdo que están bajo mi autoridad, y pondré todo mi empeño en hacerles hombres y mujeres de provecho.
bottom of page